La denuncia, ingresada esta mañana por mesa de entradas del edificio de Libertad 731, le atribuye "una excesiva demora" y "parcialidad" al juez federal que tramita la causa por la que, desde el 5 de abril pasado, se encuentra detenido el empresario santacruceño Lázaro Báez.
Así lo informaron a Télam fuentes del Consejo de la Magistratura, quienes detallaron que, en su presentación, la legisladora de Confianza Pública hizo hincapié en que, aun siendo de público conocimiento las notas periodísticas sobre la dudosa procedencia del dinero del empresario patagónico, el magistrado mostró en sus escritos "una manifiesta parcialidad", y una "excesiva demora" en su actuación "desde 2013 hasta 2015".
En este sentido, mencionó una nota del periodista del diario La Nación Carlos Pagni que hizo referencia a una supuesta reunión que el juez Casanello habría mantenido con la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner -cuando aún estaba al frente del Ejecutivo- en la que habrían acordado -según la versión del periodista, también mencionada por su colega Eduardo Feinmann- una garantía de impunidad a cambio de dinero.
De hecho, fue ante esas versiones periodísticas que ayer el juez federal Sebastián Casanello se presentó ante el Consejo de la Magistratura, el órgano del Poder Judicial encargado de seleccionar, controlar y sancionar a los jueces, para ponerse a su disposición.
Según fuentes del Consejo, el juez concurrió personalmente y pidió a los integrantes de la Comisión de Disciplina y Acusación que se labrara un acta en la que quedara constancia de que se estaba poniendo a disposición del cuerpo y en la que pretendía también realizar algunas afirmaciones como descargo ante aquellas denuncias.
Sin embargo, dado que hasta ayer no existía ningún expediente en contra del magistrado, el pedido fue denegado y, a cambio, se le ofreció analizar el tema en el próximo plenario de consejeros, previsto para el 16 de junio.
No obstante, en su reunión de ayer, que siguió al plenario del organismo, la Comisión de Disciplina y Acusación informó a sus integrantes sobre la presentación realizada por Casanello, y también se informó -tal como lo pidió el propio Casanello- que el magistrado no estará en el país entre el 1 y el 14 de junio próximo.
El juez Casanello integra la veintena de jueces argentinos que participará este viernes y sábado en El Vaticano de una cumbre sobre trata de personas y crimen organizado, organizada por la Academia Pontificia de Ciencias Sociales.
Además, la Corte Suprema de Justicia autorizó al magistrado, a uno de sus secretarios y al fiscal Marijuan a viajar entre el 6 y el 11 de junio próximo a Suiza en el marco de la investigación del caso Báez, con el fin de destrabar exhortos y recabar información.
En base a la información periodística que circuló en los últimos días, Casanello fue denunciado por el presunto delito de cohecho por el abogado Leonardo Martínez Herrero.
Tras el sorteo de rigor, la presentación recayó en el juzgado en lo criminal y correccional federal número 2, a cargo de Sebastián Ramos, por lo que a partir de ahora la fiscalía deberá determinar si corresponde o no impulsar una investigación.
Atento a estas circunstancias, el juez Casanello publicó ayer una comunicado a través del sitio web del Centro de Información Judicial (CIJ) , donde calificó de "falsedades" a lo dicho por Feinmann en el programa de América, y otras versiones periodísticas.
"En el tiempo que llevo de juez –más de tres años y medio- siempre consideré (y considero) a la prensa esencial para el funcionamiento de las instituciones democráticas. Comprendo que las opiniones críticas forman parte de su labor y justamente por respeto a ese trabajo periodístico, a la libertad de expresión y al derecho de los ciudadanos a informarse, entiendo necesario señalar públicamente que las afirmaciones realizadas son absolutamente falsas y constituyen una operación calumniosa que busca afectar mi honor e interferir en mi labor como juez", dijo en ese escrito.
Casanello negó también haber participado de reuniones en la Quinta Presidencial de Olivos con la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En este sentido, afirmó que "nunca" estuvo allí, que tampoco se reunió con la ex mandataria, y que tampoco recibió una contraprestación de ninguna especie "para que tome una decisión jurisdiccional en uno u otro sentido".
"Sobre mi desempeño acepto cualquier tipo de crítica pero no puedo pasar por alto que, falsa e impunemente, se invente y se me acuse por un hecho de corrupción u otras conductas reñidas con el regular ejercicio de mi cargo", concluyó.
En tanto, tras la presentación realizada hoy por Ocaña ante el Consejo de la Magistratura, el expediente con su denuncia fue girado a la Comisión de Acusación y Disciplina, que preside la representante de los abogados porteños, Adriana Donato.
El expediente permanecerá inmóvil hasta el próximo 16, cuando se realizará el sorteo y un consejero miembro de la Comisión se convertirá en el instructor de la causa, para llevar adelante la investigación.
En base a ese trámite es que el consejero instructor propondrá al resto de los miembros de la Comisión que se instruya el expediente, es decir que continúe su curso, o que se desestime la denuncia, según lo crea conveniente en base a la información recabada.
De todas formas, se tratará sólo de un dictamen, ya que la decisión definitiva deberá ser tomada, como es de rigor para estos procedimientos, por el plenario del Consejo de la Magistratura, donde participan los trece integrantes del cuerpo.
FUENTE: (http://www.telam.com.ar/)
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